A propósito de Jorge -reflexión-

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Se ha conseguido, pero esto ya no es noticia. España ya tiene a su campeón en la máxima categoría del motocross mundial, pero esto tampoco es noticia. Lo que sí es noticiable es el hecho de que, por fin, un domingo, los españoles, vayamos a una. Me brota un orgullo sensacional de ver cómo, tal día como ayer, 17 de septiembre de 2023, hacemos historia. Una jornada para juntar sensaciones, para ver como un chaval que se nos ha hecho mayor subiendo marchas ha demostrado que en lo que muchos creían/creíamos podía tornarse en realidad.

Lejos, y ya mejor aparcamos por unos días el tema, quedan las reticencias a una manera de pilotar, a una mentalidad y a un modo de vida que desde demasiados megáfonos se ha archicriticado.

Se ha dejado patente que la regularidad es la máxima de cualquier Liga o competición de varias, o muchas, semanas de luchar, trabajar, mostrarse sereno y, al fin y al cabo, mantenerse sobre la moto y reflejar tu mejor versión. Siempre fiel a un estilo y a unos valores, siempre… se ha puesto la guinda al pastel.

Prado es, ha sido y será talento, pero también es sacrificio, el saber tragarse muchas cosas y devolverlas en los circuitos, y en los podios internacionales… simplemente es… Prado.

La autocrítica está bien, si es constructiva. Pienso y creo que no tiene cabida cuando tan solo busca deshacer el esfuerzo y el trabajo del prójimo. Da muestras de derrotismo.

Mal verá el que interprete estas líneas como un alegato a las lindezas de un gran piloto y el intentar aplacar cualquier opinión. Ni mucho menos. Porque para gustos, colores.

Sin embargo, sí se puede leer, literal y entre líneas, que, de vez en cuando, nos tiramos demasiadas piedras sobre nuestro propio tejado. Disfrutemos de que hoy Jorge Prado, el motocross español, el mundo del motor y todos los españoles que no sabían de qué iba este deporte están en la cima. Aprendamos también a saborear el camino… que azotes ya nos dan de puertas para afuera.

Gracias ya no solo a este súper pilotazo, sino a todos y todas los que con vuestro aliento lo habéis hecho posible.

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