José Antonio Butrón es, en la actualidad, un hombre feliz. Ya ha visto la luz al final del túnel tras seis meses pasando un auténtico calvario. Aquella desafortunada caída entrenando en la República Checa a finales de abril le ha llevado a estar seis meses en el dique seco. Y es que no era para menos. Tuvieron que recomponerle el tobillo izquierdo por las numerosas fracturas que sufrió.
Sin embargo, ya ha vuelto a sentarse a lomos de su KTM y, además, a subirse a lo más alto del podio. Un doble triunfo, el de la pista y el de dar un puntapié a largos días sin hacer lo que mejor sabe hacer, pilotar.
Hoy hemos podido contactar con él, que se encuentra en el Salón de la Moto EICMA de Milán junto a su Team Manager en el equipo JD Gunnez KTM, estructura con la que volverá a hacernos vibrar en el Mundial de MXGP 2020.
“Hace seis meses de mi operación y aún no estoy al cien por cien. Estoy montando en moto todo lo que puedo, corriendo las carreras que hay en Andalucía para volver a coger la confianza que tenía antes”. Eso sí, nos remarca que “tengo que hacerme un vendaje en el pie antes de entrar a pista, las curvas de izquierdas todavía me cuestan mucho, pero voy mejorando, aunque sea lentamente. Mi objetivo es estar al cien por cien en febrero del año que viene. Tengo todavía tres meses de margen para comenzar la temporada lo mejor posible. Me va a costar bastante, pero no es imposible”.
Seguirá con una estructura que ya conoce y con una máquina que domina a la perfección, por lo que relata que “estaré entrenando por España en pretemporada, trabajando con tranquilidad para intentar que el año que viene salga lo mejor posible. No será nada fácil, pero lucharemos al máximo como siempre… para mí volver a correr el Mundial, hacerlo en España y estar como me encuentro ahora encima de la moto me produce mucha felicidad, no puedo estar de otra manera sinceramente… estoy contento”.
Butrón ha vuelto a demostrar que es un auténtico toro ante cualquier adversidad. Nuestra más sincera enhorabuena por continuar adelante en este mundillo tan complicado y reservado a unos pocos como es el de la elite del motocross internacional.
