En MX2 Mattia Guadagnini, Jago Geerts y Tom Vialle han tenido el privilegio de ganar frente al público local. En cambio para los pilotos de la categoría reina jugar en casa no ha ido como se esperaba en esta temporada.
Jeffrey Herlings y un espectacular accidente en Oss no solo terminaba con las chances de ganar el único GP celebrado en Holanda, también ponía en tela de juicio su continuidad en el campeonato. En Lacapelle-Marival Romain Febvre ilusionaba a los aficionados tras vencer en la primera manga a Jeffrey Herlings en un duelo de igual a igual. Pero el francés no pudo replicar la misma actuación en la segunda manga y acabó segundo. Antonio Cairoli, por su parte, fue tercero en un lluvioso fin de semana en Maggiora y posteriormente en Riola Sardo sufriría una dura caída en los cronos que le dejaba fuera de competencia. Cairoli contará con más oportunidades ya que a partir de este fin de semana el campeonato arribará a Italia para disputar las seis últimas pruebas en Pietramurata y Trentino; aunque de todas maneras ya saldó una gran deuda con su público al ganar el Motocross de las Naciones disputado en Mantova a finales de septiembre.
Jorge Prado se perfilaba a ser la excepción de la regla en el Gran Premio de España. Sin embargo, el polémico incidente con Jeffrey Herlings (colisionaron en el aire al final de la primera manga) dos semanas atrás en Alemania dejaba al gallego con secuelas para Francia, donde con gran esfuerzo pudo ser 16-12 para un 14 global. En Arroyomolinos sin dudas fue mucho mejor de lo que se esperaba. Obtuvo dos contundentes FOX Holeshot, lideró vueltas y hasta donde pudo opuso resistencia a sus rivales con una afición que no paró de alentar en cada paso por las repletas gradas. A pesar de finalizar segundo (2-3) afirmó que éste ha sido “El mejor Gran Premio del año”.
Es irónico. Prado ha ganado en cada rincón del Mundo desde su llegada al Mundial de Motocross, en cambio la victoria en suelo español se resistió en 2018 antes de obtener un solitario 1-1 (el primero en la categoría MXGP) el pasado año bajo este mismo escenario. La diferencia es que por aquel entonces no pudo disfrutar del mismo calor humano que el recibido este fin de semana debido a las estrictas restricciones por pandemia que acompañaron todo el 2020.
