Adam Wheeler de OTOR Magazine entabló un interesante dialogo con el vigente campeón Tim Gajser, quien recientemente ha vuelto a la acción tras pasar más de mitad de temporada recuperándose de una complicada fractura de fémur padecida antes de la ronda de apertura en Argentina.
Cuando Tim Gajser sufrió la espectacular caída en Pietramurata durante la pretemporada para la temporada 2023 de MXGP, la cual acabó con una fractura de fémur, la rutina y conciencia del vigente campeón del mundo dieron un vuelco en ese mismo instante. El esloveno conoce bien de lesiones, sabe de recuperación y rehabilitación. También sabe lo que es perderse Grandes Premios y pasar por el miserable aspecto del motocross. A pesar de que la recuperación tardó más de lo esperado, Gajser ya ha disputado cuatro rondas con un 5º como mejor resultado en una manga. Incluso con el pragmatismo que rodea su regreso tras el accidente en Italia y sabiendo que hay relativamente poco que sacar de la campaña 2023, es un escenario desconcertante para un piloto de fábrica que ha estado constantemente al frente durante nueve temporadas.
Mientras hablamos en el paddock de Uddevalla el sábado por la tarde, Gajser parece tan en forma y despreocupado como siempre, pero el barniz de invencibilidad – de seguridad en sí mismo – que se ha forjado durante las siete temporadas anteriores en MXGP parece un poco más blando. Es refrescantemente modesto acerca de su estado, a pesar de que está en forma y de nuevo en la valal de salida. Pedir a un titán de las carreras como Tim que reflexione sobre el estado de su “talón de Aquiles” es como desvelar una fascinante capa de la psique de un atleta. También es insólito ver a este animal de resultados y alto nivel volver con cautela a terreno conocido. Pone de relieve el inmenso valor de la estima y la creencia. Los corredores de motocross tienden a restar importancia a sus lesiones, pero Gajser es franco sobre su evolución. La caída y la fractura podrían haber acabado con su carrera.
“Va… despacio”, sonríe Gajser mientras comenta sobre su actual estado. “Físicamente estoy bien, pero mentalmente aún no estoy donde debería. Necesito ganar confianza. Volver a demostrarme a mí mismo que puedo hacerlo. Sé que puedo ser rápido, pero también necesito resultados que lo respalden. No tengo problemas con la pierna, pero a veces me duele. Si comparo las dos piernas, no son iguales, pero paso a paso lo estamos consiguiendo. Fue una lesión dura y estuve bastante tiempo alejado de la moto y de las carreras. Sabía que al momento de volver no estaría en lo más alto ni lucharía por el podio, pero tampoco hay mucha presión: estamos tratando esta temporada casi como un periodo de entrenamiento. También estoy haciendo pruebas durante las carreras, algo que nunca tuve la oportunidad de hacer porque siempre estaba luchando por el campeonato y cuando estás en esa posición no quieres arriesgarte. Es una temporada diferente; una que no había tenido antes”.
¿Qué se siente al estar compitiendo sin la presión del campeonato rondando por la cabeza? Es muy inusual para ti…
¡Es raro! Incluso venir a las carreras y no pensar en los puntos… desde que estaba en MXGP, e incluso en MX2, siempre me pasaba eso. Siempre había un título al que aspirar. Es un año diferente. Tenía la rutina de pasar de una temporada a otra, y alrededor del Covid-19 los calendarios cambiaron y hubo un periodo en el que no hubo mucho descanso. Fue difícil recuperarse de esa intensidad y recargar las pilas. Desde un punto de vista, me estaba perdiendo las carreras mientras estaba lesionado, por supuesto, y prefería estar en las carreras que sentado en casa en el sofá esperando. Pero desde otro punto de vista, mi cuerpo se recuperó y pude saborear un poco de “vida normal”. Nunca había tenido eso. Me alegró volver para el Gran Premio de República Checa. Había echado de menos estar con el equipo y con los aficionados.
¿Qué significa para ti la falta de confianza? ¿Está relacionada con la forma que abordas una pista o atacas a un rival?
La confianza es difícil de describir. Es ese pequeño “extra” que necesitas para estar arriba o para ganar carreras. Yo diría que la confianza es simplemente creer en uno mismo. Creer que puedes ganar. Que te ves ganando antes de hacerlo. No sé cómo explicarlo, pero cuando llegas a algunas carreras sabes que vas a ganar. Es así. Tienes una sensación. La vida es buena, todo es bueno. Es extraño hablar de ello… pero es la sensación de que cada fin de semana será “tu día”.
Ahora tienes más experiencia, pero ¿se puede comparar esta situación con la de 2018, cuando volvías de otro accidente en pretemporada [una fractura de mandíbula y una conmoción cerebral] donde también tardaste un poco en recuperar la confianza…?
Vaya… dos lesiones diferentes, la verdad. Esa también me dio mucho miedo, pero no estuve tanto tiempo alejado de la moto. Fueron unas semanas. Me perdí la primera ronda y luego volví a competir. Esta fue mucho más brutal. Al principio no esperaba que la recuperación fuera tan difícil. Pensaba que en dos meses o así volvería a subirme a la moto y que en tres estaría listo para competir. Pero no todo salió según lo previsto y el hueso no se estaba curando como esperábamos. Me costó más. Estuve cuatro meses sin montar en moto y cinco meses después de la caída volví a competir. Al principio no sabía lo grave que era la lesión… pero el fémur es el hueso más grande que tenemos en el cuerpo y en motocross nuestras piernas son como una segunda suspensión; tienes que trabajar mucho con ellas. No fue fácil volver… tampoco recuperar la musculatura.
¿Así que ahora eres como el mejor “piloto de pruebas del mundo”? ¿Uno capaz de ganar un Gran Premio?
[risas] En realidad… no estamos probando grandes cosas. Estamos probando diferentes configuraciones durante las carreras. Podemos jugar un poco con la suspensión. En años anteriores hacíamos la base durante el invierno y cuando me sentía cómodo entonces nos quedábamos con lo que teníamos. No cambiábamos nada, salvo unos clics y ya está. Ahora vamos en direcciones diferentes y buscamos aún más comodidad…. ¡y eso me gusta! Sé que tenemos mucho espacio para mejorar con la moto. La potencia de la Honda es fantástica, pero la estabilidad y la suspensión… si tuviéramos aún más, llegaríamos antes a los baches y la moto no se sacudiría. Ese tipo de cosas no podíamos probarlas en años anteriores.
La caída de Tim Gajser en Trentino que esfumó sus chances de revalidar el título: