Iker Larrañaga no pasará por el quirófano para sanar su fractura del hueso piramidal. Tras pasar revista por la consulta del Doctor Xavier Mir, el piloto de Marchetti Racing Team se ha decantado por la magnetoterapia para lograr el objetivo de soldar la muñeca e intentar estar en la última prueba del Campeonato de España de MX2, que se disputará la semana que viene en Alcañiz.
Larrañaga ha regresado a Reydes Fisioterapia, clínica en la que ha puesto toda su confianza en sus últimas lesiones.