Zach Osborne anunció su retiro poniendo punto final a una larga carrera de trabajo duro y dedicación, dejando como legado un importante mensaje: Nada es imposible.
En 2006 debutaba profesionalmente como uno de los jóvenes prodigios de KTM gracias a una respetable carrera en las divisiones amateurs, y en tan solo su cuarta prueba ya se encontraba al frente. Osborne tomaba el holeshot en la primera manga de Budds Creek y rápidamente abría una considerable ventaja sobre sus rivales. Todo apuntaba a que el triunfo estaba en sus manos, pero, en los minutos finales, la rueda trasera de su KTM250F sufría una avería y las posibilidades de obtener su primera victoria se esfumaban en un santiamén, mermando en las vueltas finales del primer lugar a un frustrante décimo octavo. Tal incidente sería el primero de muchos de una turbulenta aventura hacia el éxito.
Luego de dos temporadas sin mayor desempeño que un puñado de top diez en Supercross y Motocross, en 2009 con tan solo 18 años, cruzaba al viejo continente en busca de una mejor suerte en los Grandes Premios del Mundial de Motocross. Por ese entonces los mundiales no gozaban del mismo prestigio que hoy, por lo que ir allí significaba el último recurso para aquellos pilotos norteamericanos que se encontraban a la deriva sin un contrato para la temporada entrante.
A bordo del equipo Utag Yamaha del británico Steve Dixon, Osborne conquistaba con un 3-1 en mangas el exótico Gran Premio de Turquía (prueba tres) de MX2. El periplo en los Grandes Premios continuaba por unos años más con algunas apariciones en el podio, aunque sin volver a obtener un triunfo. En 2012 retornaba a los Estados Unidos para disputar las cuatro primeras pruebas de la Costa Oeste de 250SX antes de volver a Europa por última vez. Y es que al lograr el tercer lugar en Los Angeles y Oakland (pruebas 3 y 4 respectivamente), Osborne fue considerado por GEICO Honda para regresar a su país a tiempo completo durante los próximos dos años.
Ya establecido en Estados Unidos con el prestigioso equipo GEICO Honda, Osborne podía ver con entusiasmo su futuro ahora que había logrado ganarse nuevamente un lugar en su país. Desafortunadamente tanto en la temporada 2013 como la siguiente se vieron interrumpidas por diferentes lesiones que impidieron desarrollar la velocidad y experiencia importada desde Europa. Lo cosechado en esos dos años con Honda se reducen a 5 podios entre Supercross y Motocross.
En 2015 fichaba por Rockstar Energy Husqvarna, ¿y adivinen qué? Así es, las lesiones volvían a hacerse presente durante dos años más. Hasta el momento, su llegada a los Estados Unidos contaba con más lesiones que podios. En un año se había fracturado el hombro en la segunda prueba del Supercross en Phoenix, en otro sufría una fractura de pulgar y luego, en la segunda prueba del Lucas Oil Pro Motocross de 2015, se dislocaba el hombro. La mala suerte de sus primeros días como profesional seguía aferrada a él y nuevamente todo estaba cayendo en picada.
A pesar de todo, Osborne no perdió el enfoque y la motivación, y en 2016 lograba saldar una deuda de diez años: Ganar en Budds Creek. Las ironías del destino quisieron que la primera victoria de Osborne en el AMA Pro Motocross sea en Budds Creek, mismo sitio donde todo había comenzado una década atrás. Ganar allí fue un aliciente y un impulso para arrasar con ambos campeonatos en 2017.
Hay dos situaciones de la temporada 2017 que engloban la carrera de Osborne. La primera de ellas la dramática definición por el título 250SX Costa Este, el cual lograba capturar gracias a una “a todo o nada” maniobra sobre Joey Savatgy a dos curvas de la bandera a cuadros. Y por otro lado el haberse coronado Campeón AMA Pro Motocross en nada más ni nada menos que en Budds Creek. Lugar de sueños rotos, revancha y gloria.
Para 2019 afrontaba la categoría reina como una amenaza para los pilotos ya establecidos tras dejar la división 250 con tres títulos (dos Supercross Costa Este y un Pro Motocross). Por desgracia, las lesiones volvieron a emerger ese año y solo podía disputar unas pocas pruebas en cada disciplina. En cambio en 2020 volvía a por sus fueros anotando su primera victoria en Supercross y logrando el título AMA Pro Motocross en un particular campeonato de nueve pruebas bajo el telón por pandemia.
Desafortunadamente la carrera de Osborne llegó a su fin debido a una hernia de disco que se ha estado agravando desde inicios de este año, por lo que no ha quedado más remedio que retirarse luego de 16 años de trabajo duro, decepciones y conquistas. Obsequiándonos una de las mejores historias de superación de este bendito deporte.