Oriol Oliver, por fin, conseguía en el Gran Premio de Lombardía su primer podio en el Campeonato de Europa de 250cc. El piloto catalán de WZ-Racing KTM ya tuvo muy buenas sensaciones desde la primera entrada a pista para, posteriormente, ser tercero en los entrenamientos cronometrados y volver a conseguir la tercera plaza en las dos mangas de carrera.
Un paso adelante en un duro camino en este 2021 en el que Oliver ve la luz al final del túnel. Comenzó la temporada en Ghidinelli Yamaha para dejar la estructura y enrolarse en el equipo alemán, con el que todo apunta que renovará para el curso 2022.
“He estado esperando mucho tiempo este podio”, afirma entre una leve sonrisa el catalán. “Mantova es un circuito que se me da bastante bien y ya en el Europeo de 125cc casi me meto entre los tres primeros, aunque me sacó el bueno de Eddie Jay Wade. El sábado tuve dos muy buenas salidas, donde en la primera estuve por detrás de Yago Martínez, que se marcó un carrerón, y cometí un fallo, pero pude ser tercero. Ya en la segunda, seguí a Lapucci y no se me iba, aunque me fui al suelo y finalmente volví a acabar en la tercera plaza. Una segunda posición muy buena y ahora a ver qué pasa en la última carrera de la temporada”.
Pese a que todavía no tiene nada firmado con WZ-Racing KTM, Oliver asegura tener una moto muy competitiva y contar con opcions de seguir en el mismo equipo el año que viene.