Mitch Evans llegó y pisó el podio a la primera. El piloto australiano sorprendió a todo el mundo en el primer GP de la temporada a bordo de su Honda del equipo 114 Motorsports, con la que consiguió subirse al 3r cajón en la que era justo su primera prueba en el Mundial de MX2.
En pretemporada ya había dejado algunas pinceladas más que prometedoras en el Internacional Italiano. Livia Lancelot debe apuntarse un buen tanto con su fichaje, pues Evans era un piloto relativamente desconocido que en estos últimos años había competido solo en Australia. En 2016 fue Campeón Júnior australiano de MX y SX, en 2017 fue 3º en su año de rookie dentro la categoría MX2 del Nacional aussie y en 2018 decidió dar el salto a las 450c.c. con solo 18 años. Ahora, en su vuelta a las 250c.c, está siendo la sensación en estos primeros meses del año. La cantera australiana parece ser inagotable, y si el año pasado Jed Beaton maravilló a todos, este año parece que Evans va camino de coger su testigo y convertirse en una de las sensaciones del Mundial.
En 2018 ya pudimos verle en el Motocross de las Naciones de RedBud, donde defendió los colores de Australia en la categoría Open logrando un 12º y un 10º. Antes de las Naciones, la última vez que había entrado en contacto con la competición europea había sido en el Mundial Júnior del 2010 en Francia, cuando aún pilotaba una 65c.c, fue 6º.
En Argentina fue discreto en las sesiones de entrenamientos, pero ya el sábado en la Qualifying Race terminó 6º y el domingo remató su debut de ensueño con un fantástico 5-3 en las mangas. Le ganó incluso la partida a Calvin Vlaanderen, el hombre Factory de Honda en la categoría MX2. Deberemos seguirle de cerca en los siguientes GP.