El piloto de Kawasaki Factory, Jeremy Seewer, aún no ha conseguido un Campeonato Mundial de Motocross, pero tiene que estar muy contento con su carrera, una carrera llena de resultados entre los dos primeros en el Campeonato Mundial de MX y 13 victorias en Grandes Premios, cinco en MX2. y ocho en MXGP. La mayoría de los pilotos soñarían con tal logro. Seewer, que llegó a la escena del Gran Premio en 2015, pudo terminar segundo en la clase MX2 en 2017, luego siguió con el octavo lugar en MXGP en 2018, segundo en MXGP en 2019, 2020, 2021 y 2022 antes de terminar tercero el año pasado.
El siempre amable y abierto piloto de Kawasaki hizo el gran paso desde el equipo oficial de Yamaha, donde había corrido durante los últimos seis años, a las máquinas verdes y, aunque siente que le llevará un tiempo alcanzar su verdadera velocidad con la nueva moto, está muy emocionado por la próxima temporada.
“La monté justo después de que terminara la temporada”, dijo Seewer sobre la nueva moto. “Sólo para conocernos y probar algunas cosas, pero nada serio, sólo para conseguir una base, sólo para probar algunas cosas. Luego me tomé un tiempo libre, porque es necesario con la temporada que tenemos. Monté la moto en diciembre por un tiempo, solo para dar algunas vueltas, acostumbrarme a la moto y ahora estoy en Cerdeña, haciendo algunas cosas de suspensión y ahora realmente nos ponemos a probar y comenzamos a hacer la moto como quiero.”
Su estancia en Cerdeña le supondrá mucho trabajo. Seewer sabe que se necesita trabajo duro, ya que configurar cualquier moto de fábrica a tu gusto requerirá tiempo y paciencia, y el piloto suizo no quiere frustrarse en este proceso. “En primer lugar, necesito poner a punto la moto. Llevará tiempo, no me estreso, me tomo mi tiempo, tengo paciencia, hago los deberes y ojalá lo tenga todo listo, pero sin presionarme, porque eso no mejorará. Prepara la moto y físicamente me estoy preparando desde noviembre con mi cuerpo. Estoy esforzándome mucho y tratando de dar un paso más y ser más y más fuerte cada año. Trabajo duro”.
Y, por supuesto, su compañero de equipo, el ex campeón mundial de MXGP Romain Febvre, es un piloto en el que deberá concentrarse, pero con tantos muchachos rápidos en la clase 450, Seewer sabe que es mejor que se lleve bien con el francés que tener problemas personales entre sí. “Romain y yo nos respetamos mutuamente, éramos compañeros de equipo en Rinaldi en 2019 y, ya sabes, cada uno hace lo suyo para ir rápido. Tal vez nuestros caminos se crucen y terminemos haciendo algo pequeño juntos, pero en general, yo sigo mi camino y él sigue su camino. No de manera negativa, no es que vaya a hacer lo que él no hace. Él sabe lo que necesita y yo sé lo que yo necesito. Ambos somos lo suficientemente profesionales como para no molestarnos. Creo que es muy saludable entre nosotros y probablemente nos presionaremos mutuamente de alguna manera. No somos muy cercanos, lo cual es normal, pero tampoco nos odiamos. Es una relación sana”.
