Francisco García, Fran Carbonero, tiene solo dieciséis años, cumplirá los 17 el 9 de octubre, pero ya sabe lo que es ser todo un piloto profesional… para lo bueno y para lo malo. En estos momentos le está tocando lidiar con una lesión de ligamento anterior de su rodilla derecha que le ha obligado a pasar por el quirófano. El tiempo de recuperación será largo, más o menos vivirá el proceso que ha pasado esta misma temporada Rubén Fernández tras ese frustrante inicio de MXGP 2024 en Argentina.
No obstante, el piloto español es consciente de todo ello y mira con mucho optimismo al curso que viene. Una caída el día antes de viajar al Campeonato de Europa de 250cc en Suecia ha dado al traste con su crecimiento, aunque parece que la decisión de operar cuanto antes está más que bien tomada, pues le queda un futuro, todo el futuro, por delante.
“Me encuentro bien, la operación fue perfecta y ahora me toca estar una semana de reposo total”, nos explica el de San Roque. Tras ser tercero en el Mundial Júnior en categoría 125cc este año y conseguir el podio en Arco di Trento, tanto él como el equipo de la RFME habían puesto su objetivo en que pudiera debutar en el Mundial de MX2 en Holanda, algo que se tuvo que posponer por la lesión.
Está previsto que la semana que viene ya viaje a Madrid para pasar por la consulta de la doctora Isabel Guillén, evaluar la evolución de la intervención y comenzar la rehabilitación en el centro por excelencia de confianza de los pilotos españoles y muchas de las figuras internacionales, Fisio Reydes.
Con ganas de recuperarse cuanto antes, ya ha pedido a su equipo, Mequitec Racing GasGas encargado de gestionar el equipo Júnior de la RFME, que le haga llegar su bicicleta, “porque es de lo que ya tengo ganas, de empezar a moverme y espero poder hacerlo en unos diez días”.
Su temporada ha sido buena hasta el parón obligado. “Ya llevaba desde el año pasado en Mequinenza, donde tiene la base mi equipo, pero creo que este año he dado dos pasos adelante, no solo uno. Trabajar con los mejores pilotos, entrenar con Dani Hernández, que es un muy buen entrenador, y convivir junto a Jordi, Pili, los mecánicos y todos me ha hecho crecer mucho. He tenido carreras con altibajos, pero pienso que ha sido una buena temporada. Ahora hay que empezar a prepararse para 2025. Creo que en diciembre ya estaré bien, pero soy consciente de que será un proceso largo”.
Todavía no se conoce con qué estructura correrá el curso que viene, ya que, tal y como nos explica, “desde que me lesioné no he hablado nada. A ver si podemos cerrar algo cuanto antes y luego a trabajar duro para regresar a la moto con mucha más fuerza”.
