Cuando Romain Febvre irrumpió en la escena del EMX en 2011, el francés levantó el título de 250cc en su primer intento, y desde entonces rara vez ha aparecido fuera de los seis primeros en el escenario mundial. Lo más destacado de su carrera fue ganar el título de MXGP en 2015, en su temporada de novato, pero desde entonces, Febvre ha tenido que soportar algunas lecciones difíciles, así como algunos impactos fuertes, el último de los cuales sucedió en Suecia hacia el final de la temporada 2019. Texto: MXGP Fotos: Ray Archer/Kawasaki
Después de haber sido piloto de Yamaha desde 2015, Febvre decidió cambiar el número de su moto, equipo y pilotaje para este 2020 y, mientras nos preparamos para otro año de MXGP, decidimos ponernos al día con el ex campeón mundial para ver cómo ha sido su recuperación.
Volvamos al comienzo de la temporada 2019. Ya te perdiste los últimos tres GP de 2018, por lo que presumiblemente tuviste un entrenamiento de invierno difícil para la temporada 2019. ¿Es correcto?
En realidad no estuvo mal, porque estuve parado desde fines de 2018 (después de un accidente en Turquía); estuve tres meses sin rodar debido a una conmoción cerebral, y el médico me dijo que me detuviera por tres meses, pero ya podía comenzar a montar nuevamente a fines de noviembre o algo así; en realidad, fue una pausa larga, aunque físicamente estaba bien, no tuve problemas, nada en absoluto, necesitaba parar para no tener impacto en mi cabeza, pero mi condición física estaba bien, así que cuando comencé a pilotar de nuevo, físicamente pude hacer todo lo que quería. Así que, desde este punto de vista, no fue tan malo; de hecho, pasé un invierno bastante bueno.
Las carreras de pretemporada estuvieron bien, pero cuando llegaste a Argentina, ganaste la primera carrera clasificatoria, así que debiste de pensar: “¡Sí, Romain Febvre está de vuelta!”
¡Claro, la pretemporada fue bien, pero Argentina…! Realmente me encanta el circuito, todos los años espero subir al podio, pero todos los años no está sucediendo, pero es así. La carrera clasificatoria fue bastante buena, tuve una buena batalla con Tim Gajser, que luego cayó frente a mí, así que, digamos, me dejó ganar, me dejó terminar con bastante facilidad, pero aún así fue bueno comenzar la temporada de esta manera.
En la primera manga estabas tercero, se te veía cómodo, realmente fuerte y relajado y, en cierto modo, pilotaste con cierta madurez, tal vez porque te diste cuenta de que no puedes ganar el campeonato en la primera carrera y tal vez eso se reflejó en tu conducción…
Sí, sentí que iba bien y vi que estaba luchando directamente con Cairoli y Gajser allí. Terminé tercero en la primera manga, pero no estaba tan lejos de ellos, pero era mi lugar, digamos; tal vez segundo o tercero, pero no ganando, porque Cairoli estaba rodando realmente fuerte, pero el tercero para mí estaba bien, así que comenzar la temporada con un podio fue bueno, ¡pero luego el choque ocurrió en la segunda carrera!
Cuando chocaste, ¿notaste de inmediato que algo estaba roto?
Cuando aterricé, sentí que me torcía el tobillo, pero cuando intenté ponerme de pie no pude y sentí mucho dolor de inmediato, así que supe que era algo más, aunque en el centro médico de la pista me hicieron una radiografía y no vieron nada roto. Sin embargo, cuando volví al hotel por la noche mi pie estaba muy hinchado, y fue entonces cuando supe con seguridad que había algo roto.
Pasaste de mirar al tercero en la primera manga a luego terminar con un tobillo roto. ¿Cuál fue el nivel de decepción y cómo lidiaste con eso?
Fue duro. Sabía que el campeonato se había ido, porque no sabía cuánto tiempo me iba a perder, pero me dije que, si podía volver perdiéndome solo unas pocas carreras y regresar al nivel en el que estaba en ese momento, podría terminar la temporada bastante fuerte. Estaba decepcionado por el campeonato, pero a la vez pensaba que, hace unos años, ante esa misma situación, habría estado mucho más abatido y me habría sido difícil volver a subir a la moto para tratar de recuperar mi ritmo y todo. Ahora soy más positivo, tratando de encontrar la cara positiva de las cosas para mantener la motivación.
Cuando volviste, estabas octavo en la general en Portugal, fuiste tercero en Francia con un segundo lugar en la segunda manga. ¿Fue un buen momento para ti o fue solo otro podio?
No, fue bueno porque ya en Portugal, sí, fui octavo en la general, pero hice 9-6, así que ya estaba feliz con mi sexto lugar, incluso el sábado estaba feliz porque mi velocidad a una vuelta fue realmente buena, y a veces todavía sentía algo de dolor en las curvas, pero ya estaba feliz por el hecho de viajar a Portugal. Y correr en Francia siempre es especial, y más al terminar segundo en la segunda manga. Estaba realmente feliz, y también lideré durante unos veinte minutos, así que volver de esta manera después de perderme cuatro GP… Nunca es fácil volver durante la temporada, así que estaba feliz por todo.
Hubo otro podio en Letonia, y en Indonesia fuiste segundo de la general y obtuviste una victoria en la segunda carrera en Palembang, tu primera victoria desde Suecia 2017. ¿Supuso un gran alivio?
Sí, siempre he sido bueno en Loket, pero estaba más concentrado en Lommel, porque sabía que en la arena podía montar bastante fuerte, así que no estaba enfocado en Loket, lo que quizás era mejor. Ya me sentí bien allí el sábado, obtuve la victoria en la carrera de calificación y todo el domingo, y gané ambas mangas, así que fue bueno y no hay mejor manera de ganar, de manera que estaba muy feliz por eso, y realmente esperaba mucho de la carrera de Lommel.
Lommel no es un lugar fácil para pilotar, fue un fin de semana caluroso y lograste ganar la primera carrera, pero parecías destrozado después de esa primera manga. Fue una victoria costosa, digamos.
Traté de darlo todo y ya el sábado gasté bastante energía, porque tuve un pequeño choque y volví al segundo para una buena selección en la parrilla de salida, pero seguro que derroché un poco más de energía que de la que quería, y lo mismo sucedió en la primera carrera del domingo. Pasé a Tim y, a mitad de la manga, me dije que quería ganar, porque Lommel es la carrera más dura del año, así que lo di todo. Gané la primera manga, pero después fue realmente duro y caluroso, y especialmente en la segunda manga, al contrario que en la primera, no tuve un buen comienzo, así que tuve que adelantar a muchos otros pilotos. Creo que Tim estaba al frente con Glenn Coldenhoff, se presionaron mutuamente y Max Anstie también estaba allí, por lo que me resultó muy difícil llegar a ellos. Terminé segundo en el podio, así que acabé muy contento con el fin de semana.
Estabas progresando en el campeonato y después de Italia estabas séptimo, pero luego sucedió lo de Suecia. Fuiste segundo en la primera carrera y se te veía cómodo en la segunda manga, hasta que a falta de cuatro vueltas tuviste el accidente. ¿Qué recuerdas?
¡Lo recuerdo todo! Recuerdo que tenía a un piloto doblado delante de mí, y él se me cruzó por delante, así que salí un poco más afuera. Había un pequeño salto bajando la colina, y en el despegue perdí el equilibrio. La parte trasera de mi moto fue de izquierda a derecha de inmediato y me sacó de la moto, y cuando aterricé, nunca pensé que iba a ser un accidente realmente grande, solo me dije ‘¡oh, mierda, me estoy cayendo…!’ Solo necesitaba volver a subir rápidamente a la moto, porque no había una gran brecha respecto a los demás pilotos. Sabía que tenía que volver a la moto pronto… Pero luego, cuando aterricé, sentí inmediatamente la grieta en mi fémur, y cuando miré mi pierna, vi que estaba completamente a la izquierda y la otra parte a la derecha, así que dije: ‘Sí, me rompí el fémur…’. Así que traté de encontrar la posición con la que sentía menos dolor y luego esperé a que llegaran los médicos.
Y en ese punto, ¡todo había acabado! No es la forma en que querías terminar la temporada, claro, pero cuando estás sentado al lado de la pista, tal vez con un millón de cosas pasando por tu cabeza… ¿Cuál era tu mayor preocupación, tu mayor miedo en ese momento?
Honestamente, no estaba pensando en el campeonato, ni en el MXoN… Solo sentía mucho dolor y únicamente pensaba en dejar la pista para ir al hospital con buena atención y un buen médico, porque sabía que tenía operarme. En mi mente, nada había sobre motocross. Sabía que me había roto el fémur, pero no sabía si había algo más, así que en ese momento solo estaba pensando en mi salud y en cómo necesitaba arreglar mi pierna de la mejor manera. En los días posteriores, pensé en la carrera y en por qué me caí y qué sucedió. Por supuesto que no quería terminar la temporada así, pero, de todos modos, nunca es bueno caerse y romper algo. También me decepcionó terminar mi trato con Yamaha de esta manera. Esperábamos terminar la temporada bastante fuertes, con algunas buenas carreras, como en el Motocross de las Naciones, ¡pero así es como sucedió!
Durante las dos semanas que siguieron a la operación, sentí tanto dolor que no estaba realmente preocupado por el motocross, por las carreras, por cuándo regresaría a una moto ni nada parecido. Solo estaba tratando de sentir menos dolor, pensaba en cómo volvería a casa y en dar con el mejor personal posible para la recuperación de mi pierna; encontré un centro de rehabilitación realmente bueno en Luxemburgo y en ese momento eso era lo más importante en mi mente.
Estabas en plena rehabilitación, habías firmado con Kawasaki… No era la mejor forma de comenzar la nueva relación… ¿Cómo estaba el equipo contigo en ese momento?
Entendieron la situación, por supuesto, y ninguno de nosotros quería comenzar así, pero nunca sentí ninguna presión por parte de nadie en el equipo, creo que solo miraban a más largo plazo. Tengo un contrato de dos años con opción a un tercer año, así que me dijeron que, si necesito tomarme mi tiempo este año, está bien, solo quieren que esté a tope.
Pasaron tres meses, un tiempo muy justo antes de que volvieras a la moto, lo cual resultó bastante impresionante, especialmente después de una fractura de fémur.
A mí también me sorprendió bastante cuando recibí la luz verde. Seis semanas después de la operación, el médico me dijo que estaba yendo realmente bien, que podía recuperarme rápido y estar listo para volver, pero todavía sentía algo de dolor. Luego, después de tres meses, tuve el segundo control y él me dijo que podía comenzar a pilotar y ver cómo me sentía, y que si notaba algo de dolor, que lo hiciera lentamente. Estaba realmente sorprendido, así que pensé ‘bien, veamos cómo te sientes’ y al principio me dolía, pero podía pilotar. Los saltos no eran el problema, ya que ponía la pierna en la esquina, así que dije ‘puedo comenzar a pilotar, es realmente fácil aprender cómo reacciona la moto y establecer mi posición y otros pequeños detalles’. Así que fuimos a Cerdeña a principios de diciembre y comenzamos a rodar un poco, pero en ese momento no podía pilotar dos días seguidos porque tenía algo de dolor, así que realmente nos lo tomamos con calma: rodábamos 10 minutos y luego 15, y fue así hasta Navidad. A partir de Navidad me sentí mejor de inmediato, aunque a principios de enero todavía no estaba al 100%, porque solo habían pasado cuatro meses, pero ya he estado sobre la moto más de treinta horas y estoy contento con mi estado actual, aunque esperamos que esté aún mejor para el comienzo del campeonato.
¿Por qué decidiste dejar Yamaha? ¿Un nuevo desafío o una nueva motivación?
Hubo algunas cosas. Yamaha me dijo que querían parar con Rinaldi como equipo y que el plan era ir a Wilvo, que sería el equipo de fábrica para la estructura MXGP; Rinaldi seguiría suministrándolo todo, pero no estaría allí como equipo. Yo no estaba de acuerdo y les expresé mis dudas respecto a ese cambio, de manera que intentaron encontrar alguna solución, por supuesto. Pero al final no sé si se impuso la opinión de Michele de parar o la opinión de Yamaha de cambiar la estructura del equipo, de manera que pensé que tal vez había llegado la hora de cambiar. Entonces, miré qué posibilidades tenía, y la posibilidad con KRT llegó de inmediato y dije que sí. Solo necesitaba probar la moto para tener una opinión de primera mano, y cuando lo hice me sentí muy bien. No fue fácil tomar esa decisión después de cinco años con Yamaha en los que tuve una relación increíble con el equipo y con todos, desde Eric De Seynes (presidente de YME) a Paolo Pavesio, toda la gente fue muy amable conmigo. También sabía que existía la posibilidad de que nunca tuviera una relación mejor con otra marca o con otro equipo, pero me dije a mí mismo: ‘no me importa, me arriesgaré, porque me gusta Kawasaki, y además con el cambio Yamaha quizás no me gustará tanto’. Y no quería arriesgarme a estar en un lugar y no ser feliz, así que creí que quizás era el momento de cambiar. He pasado cinco años en Yamaha, pensé, cinco años con cosas buenas y con cosas malas, por así decirlo, de manera que me dije que estaba listo para cambiar. Tomar la decisión me costó alrededor de un mes, tal vez un poco más, pero luego lo hice y para mí era el mejor proyecto.
¿Cómo es tu relación con KRT? François Lemariey es francés, gran parte del equipo es francés… ¿esto supone una gran diferencia para usted?
He estado con Kawasaki durante el invierno y hasta ahora todo va muy bien, pero todavía estamos tratando de aprender el uno del otro. Nunca antes había montado Kawasaki, nunca antes había usado la suspensión Showa o los neumáticos Dunlop, así que necesito aprenderlo todo en primera persona y trabajar. Es un nuevo desafío, pero realmente me gusta. Ya me siento genial con la gente y con la moto. No supone tanto cambio el hecho de que sean franceses, porque incluso en Rinaldi todos hablábamos en francés. Se trata más de estar con gente nueva y en un nuevo equipo.
¿Cómo se siente con Kawasaki en comparación con Yamaha? ¿Hay mucha diferencia?
Todo es diferente. El chasis, la suspensión,… no es la misma moto. Me siento muy bien con el chasis, porque la moto es muy delgada, por lo que la manejabilidad ha cambiado mucho. En mi opinión, la Kawasaki es más fácil de girar, por lo que me resulta más fácil andar en moto y cómo está el motor. Desde la moto estándar hasta la moto de fábrica, las características del motor y la entrega de potencia se ajustan más a mi estilo, así que, sí, me siento bien con la moto nueva.
Nueva moto, equipo, neumáticos, suspensión y nuevo número.
Antes que nada, he de decir que 461 no significaba nada para mí. Era solo que lucía el 61 en el pasado, cuando era joven, y cuando comencé de nuevo en el motocross necesitaba elegir un número, y todos los números con 61 estaban ocupados excepto el 461, así que lo elegí. Pero el cambio se produjo cuando estaba en el hospital de Suecia después de mi accidente. Simplemente surgió así porque todo iba a ser nuevo para mí en el 2020, y pensé ¿por qué no cambio también mi número? Les pregunté a algunas personas a mi alrededor qué pensaban, para conocer su opinión, sobre la posibilidad de lucir un dorsal con una solo cifra. En ese momento aún no habían elegido el 3, y el 90% de las personas dijeron que pensaban que era una buena idea, así que creí que sería bueno hacerlo. Estaba buscando entre el 2 y el 9. No podía tener el 1, y el 2 era posible, pero no me gustaba tanto. El 3 me gusta mucho, pero cuando comencé a pensar en el 3 me vino a la cabeza que Eli Tomac usa exactamente el mismo, también en Kawasaki, en los EEUU, así que dudaba, porque todos dirían ‘Eli Tomac, bla, bla, bla,… Así que no sabía qué hacer. El 4 no podía, porque es Tonus, el 5 estaba disponible y el 6 es Paturel. El 7 es Leok y el 8 y el 9 eran posibles, pero el 9 era el mismo que Adam Cianciarulo, así que me dije: ‘recordará a Cianciarulo o a Tomac”, así que elegí el 3, porque realmente me gusta cómo se ve en la camiseta y en la moto, aunque una vez más no significa nada especial para mí, solo quería cambiar.
Pregunta final: ¿cuáles son sus objetivos ahora para 2020?
El primero, sentirme bien con la pierna, estar al 100% con mi pierna al comienzo de la temporada, y si no es así, esperaré ese momento. Estoy muy contento con la moto y eso es lo principal para mí en este momento: sentirme bien con la moto y si consigo eso sé que después los resultados vendrán. Veré si estoy al 100% en Inglaterra para la primera prueba, y luego cuando esté allí ya veremos, pero el gran reto es ser constante sobre la moto, no cometer errores y pilotar como sé que puedo hacerlo, y si ya puedo conseguirlo en Inglaterra, entonces será genial.
