El piloto de Bud Racing Kawasaki pasó ayer por el quirófano para sanar su lesión de la vértebra C7, fracturada en los entrenamientos libres del Europeo de 250cc en Francia.
Eddie Jay Wade está viendo como su talento sobre la moto viene condicionado, año tras año, por las lesiones desde que en 2017 se convirtiera en campeón del Mundo Júnior de 85cc.
Desde aquel entonces, el ya piloto nacionalizado español, pero con raíces británicas, no ha podido cuajar un campeonato entero por diferentes dolencias en forma de fracturas de rodilla, clavícula, vértebras o duros golpes en la cabeza, como en aquella caída en el Nacional de Calatayud de 2021 que dejó con el corazón encogido a todos los presentes por la violencia con la que se fue al suelo.
Ayer, lunes, fue sometido a una intervención de la vértebra C7, que presumiblemente ya había quedado muy tocada tras su caída en Suecia hace unas semanas y que se fracturaba del todo con la caída del pasado sábado en Saint Jean d’Angely.
Hemos podido hablar con él para conocer su estado y, por supuesto, hacerle llegar nuestras más sinceras muestras de ánimo:
“Creo que ya me fisuré la vértebra en Suecia, pero no me lo detectaron y, claro, con la caída de este fin de semana se ha acabado de romper. Se me fue de atrás un poco en el salto de meta de Francia y me fui al suelo. Por suerte, mañana ya me pondrán un corsé y me harán andar. Vigilarán que no se infecte la herida y a ver cómo voy para pronto enviarme a casa. Estoy animado pero con ganas de llegar a casa de nuevo y procesar todo lo que ha pasado”.
Wade, que ha acabado el Europeo de 250 en la décimo cuarta posición pese a perderse dos citas, valorará su futuro. Hasta el pasado fin de semana, el español tenía la intención de continuar con la estructura francesa Bud Racing la temporada 2023, aunque no hay nada firmado a día de hoy.
