El piloto del equipo Nacional de la RFME pasó ayer diferentes exámenes médicos.
Marco Alonso no tendrá que pasar, por el momento, por el quirófano. El piloto vallisoletano ha pasado diferentes pruebas en la clínica Cemtro de Madrid, atendido en todo momento por la doctora Isabel Guillén, donde todavía está ingresado, para conocer el alcance de la lesión sufrida en el octavo giro al circuito de Teutschenthal, lugar en el que se celebró la sexta prueba del Campeonato de Europa de Motocross en categoría 125cc.
En principio se temía un destrozo vario en su rodilla derecha, aunque las exploraciones han determinado que tiene varias partes de la articulación tocadas, pero ninguna de ellas rotas, por lo que, por el momento no precisa intervención quirúrgica. Además, eso sí, tiene fractura de tibia y peroné a la altura de la rodilla. No obstante, y tal y como nos explica el joven piloto, “son mejores noticias de las que pensaba, ya que creía que tenía los ligamentos rotos y entonces sí tendría que operarme. Están un poco magullados, pero no rotos. Habrá que tener paciencia para la recuperación”.
En cuanto a cómo fue la caída, apunta que “entré al salto triple de Sidi un poco cruzado, toqué al suelo con la pierna, que se debió de ir para atrás y me quedé debajo de la moto. Me sacó el piloto de MXGP Micha Boy De Waal, que también se ha preocupado de cómo estoy escribiéndome el otro día”.
Sin saber todavía cuando podrá empezar a trabajar en su rehabilitación, lo que tiene claro es que “espero iniciarlo en Fisio Reydes lo antes posible. Con Miguel (Quirós) seguro que la recuperación va mucho más rápido. La verdad es que nos quiere mucho a todos los pilotos, nos trata súper bien y se merece el cielo”.
